Thursday, June 4, 2009

Publicidad versus Arte

La publicidad en el fondo qué es? Como por ejemplo lo que enuncia TN los domingos por la noche, que la publicidad es un arte…ahora yo me pregunto justamente, si la publicidad fuera un arte…por qué directamente no le pedimos un espacio al Dr. Américo Castilla, ex director ejecutivo del Museo Nacional de Bellas Artes para codearse con grandes pintores, como Xul Solar, Petorutti, Enio Iommi, entre otros. Es realmente arte??
Según la Real Academia Española la definición de arte es lo siguiente: Arte. (Del lat. ars, artis, y este calco del gr. t?cnh). 1. amb. Virtud, disposición y habilidad para hacer algo. 2. amb. Manifestación de la actividad humana mediante la cual se expresa una visión personal y desinteresada que interpreta lo real o imaginado con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros.
Haciendo un paneo veloz, en ningún momento llego a contemplar que enuncie la frase “con fines comerciales”. La virtud y disposición de hacer algo, muy interesante, pero…al cliente le puede interesa haber invertido fortunas en un comercial para que sea visto como una obra de arte?
Si esta profesión perdiera totalmente el fin último de comunicar o difundir algo con intenciones comerciales, supeditado a los objetivos de marketing del cliente, ahí si se convertiría en un el 8vo arte quizá. Creo que los anunciantes no deben ver con buenos ojos cuando hay ring tones, presencia en los boliches como el “hitazo del verano”, y jóvenes, que en la playa corean al compás “que te clavo la sombrilla”. Uhh hablando tanto del comercial en si, casi me olvido de quien realmente importa en esta circunstancia y es el anunciante silencioso, casi pasando inadvertido ante los ojos pegados a la caja boba para nada más que un grupo de actores apiñados en una playa cantando este jingle tan pegadizo. Para rematar este párrafo, hablé todo el tiempo del comercial, pero de CTI nunca, quien fue el que puso casi 800000 pesos para que la agencia Del Campo/Nazca Saatchi&Saatchi se beneficiara con derechos de autor a la hora de pactar, por ejemplo que Toing o Ubbi tuvieran los derechos de los ring tones. Otro detalle interesante…el arte es “manifestación de la actividad humana mediante la cual se expresa una visión personal y desinteresada”, con esto se sentencia la influencia totalmente personal y carente de sentido crítico por parte de los creativos que arman la campaña con su arrogancia y ego, que suele ser costumbre, más aun si son reconocidos por haber ganado algún Cannes o Clío. Los clientes que muy a menudo creen que todo pasa por la creatividad, se entusiasman con lo que ven y aprueban la idea porque creen que su marca estará presente en todos lados. Este fenómeno suele pasar muy a menudo en agencias con grandes cuentas. Mucha plata en juego y más “arte” que pensamiento crítico y estratégico. Sin ir más lejos, el comercial actual de CTI, que ya saturó a gran parte de la población no es más que una imitación banal de los comerciales estivales de Quilmes. Haciendo un escueto paralelismo, en ambos spots publicitarios se usan los mismos planos, la misma estética, montajes, sobre montajes y demás cuestiones competentes a las productoras.
A criterio propio, el comercial que suena constantemente en los subtes de Anaflex y el metalero Miguel rudo engloba perfectamente lo que es un comercial recordable. Tiene una asociación novedosa entre hacerse el duro y el producto, que justamente está presente para que Miguel pueda hacerse el guapo bailando la Macarena en la tribuna de Chaca, tirarse del colectivo o arreglar la antena. Doy por hecho que el presupuesto fue mucho menor al de CTI, pero pese a toda la gente al menos asocia la marca con la publicidad, cualidad ausente actualmente en muchos comerciales en medios masivos. Remitiendo a tiempos de antaño, el excelente Mauzán con su afiche de 1930 para Geniol y el jingle “Venga del aire o del sol; Del vino o la cerveza; Cualquier dolor de cabeza; Se corta con un Geniol”. A casi 8 décadas de dicha gráfica la gente continúa recordando el mensaje. Sin llegar a averiguar precisamente cuál fue el costo para esa publicidad, la creatividad estuvo al servicio del producto, y no como es hoy en día que se tergiversaron los conceptos donde el producto está al servicio de la publicidad. Lo he mencionado en muchas ocasiones, pero el gran Trout en su libro que mencioné muy a menudo tiene razón con que la publicidad artística se encuentra en el ocaso, porque perdió terreno en la credibilidad, los consumidores no son esos pelotudos que en un principio se pensaba que lo eran, reflejado en las teoría de la Aguja Hipodérmica y de la Bala Mágica.

3 comments:

  1. En el fondo y en el frente, la publicidad es una mierda que sólo sirve para vender. Y si no vende, es sólo una mierda.
    La publicidad y el arte no se intersectan ni discurren paralelos: son dos rectas alabeadas que, sin embargo, comparten un mismo ámbito, ya que la publicidad utiliza ciertas herramientas artísticas (la literatura, la música, el cine, la coreografía, la actuación, la poesía) pero con fines estrictamente comerciales, que no son precisamente los fines del arte.
    Hoy en dia ni siquiera es el producto el que está al servicio de la publicidad, sino que la publicidad se ha vuelto un fin en sí mismo. La disociación entre marca y mensaje confirma que los actuales publicitarios sólo piensan en promoverse a sí mismos.
    Ah! Y era "cualquier dolor de cabeza se cura con un Geniol". Y era un jingle de radio que duró añares.

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  2. este link te va a interesar.
    www.historiadelapublicidad.com

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  3. Para mi el arte es muy extenso y variado y pienso que es un Negocio Rentable por lo que me gustaria conocer mas de su variedad.

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